
La minería es una de las industrias más importantes para el desarrollo económico de Panamá, pero también genera preocupaciones ambientales, especialmente en relación con la calidad del aire. Cobre Panamá, uno de los proyectos mineros más grandes del país, ha implementado múltiples medidas para mitigar el impacto de sus operaciones en la atmósfera.
La principal fuente de contaminación en la minería proviene de la emisión de partículas y gases como el dióxido de azufre (SO₂) y los óxidos de nitrógeno (NOₓ), generados durante las actividades de extracción y transporte de minerales. Estos contaminantes pueden afectar tanto al medio ambiente como a la salud de las comunidades cercanas. Sin embargo, Cobre Panamá ha abordado estos desafíos con soluciones innovadoras.
Entre las principales estrategias de mitigación, Cobre Panamá ha implementado estaciones de monitoreo de la calidad del aire en diversas comunidades como San Benito y Caimito. Estas estaciones permiten un control constante de los niveles de partículas y gases emitidos, asegurando que se mantengan dentro de los límites establecidos por la normativa nacional.
Para reforzar sus esfuerzos, Cobre Panamá ha establecido alianzas estratégicas con empresas especializadas como la tuvo con Kunak Technologies. A través de esta colaboración, se implementaron estaciones Kunak AIR Pro, que monitorear en tiempo real la presencia de contaminantes clave como NO₂, SO₂ y partículas en suspensión (PM10 y PM2.5), además de variables meteorológicas. Ese sistema, alimentado por energía solar, permitió una gestión eficiente y proactiva de la calidad del aire.
Además, el uso de tecnologías como las bandas transportadoras y sistemas eléctricos en la maquinaria pesada ha reducido significativamente el uso de diésel y, por ende, las emisiones de gases de efecto invernadero. En cifras concretas, la mina ha logrado una disminución del 74% en las emisiones de CO₂ equivalente. También ha instalado filtros de mangas que capturan el material particulado, manteniendo los niveles diez veces por debajo de los límites permitidos.
El compromiso de Cobre Panamá no solo se enfoca en la reducción de emisiones, sino también en la adopción de prácticas sostenibles a largo plazo. Con planes claros de reducción de emisiones para 2030, la empresa ha asumido la responsabilidad de mitigar su impacto ambiental mientras contribuye al progreso económico del país.
Con estas medidas, la minería responsable y sostenible es posible, y Cobre Panamá está marcando la pauta para una industria que prioriza tanto el desarrollo como la protección del medio ambiente.
